Qué es una auditoría salarial: situaciones en las que se necesita

La brecha salarial sigue siendo un problema en muchas empresas grandes y pequeñas en la actualidad, debido a la desigualdad de género. Las auditorías salariales son una herramienta que las empresas pueden utilizar para identificar prácticas de compensación desleales; en algunas circunstancias, también se requieren auditorías salariales.

La auditoría salarial es una herramienta para garantizar la transparencia en las retribuciones que se rige por el Real Decreto 902/2020. Se realiza un análisis del salario de todos los empleados de una empresa u organización cuando se solicita un tipo de auditoría de esta naturaleza para buscar posibles discrepancias en los sueldos.
No se requieren auditorías de salarios para todas las empresas; más bien, solo se requieren para aquellos con más de 50 empleados. Cabe señalar que, junto con la auditoría, una empresa debe implementar un plan de igualdad de cuatro años. Hacer un registro de compensación es una opción para empresas con menos empleados.

¿Registro de nómina o auditoría de salarial?

La principal distinción entre una auditoría salarial y un registro de nóminas es que este último no requiere la creación de un plan de igualdad de género. Asimismo, tiene un período de vigencia de un año y no requiere presentación a un registro formal. No importa el tamaño, es un requisito para todas las empresas.

A diferencia de la auditoría, el registro de remuneraciones debe expresar explícitamente los valores medianos de salarios y gratificaciones desglosados ​​por sexo y categoría profesional, y tiene una categoría más informativa que de decisión obligatoria.

Cómo se organiza una auditoría salarial

La evaluación de los puestos y la segmentación de los empleados son los primeros pasos en una auditoría salarial. Siguiendo esta clasificación, comienza a contrastar las diversas circunstancias de los trabajadores y trabajadoras, y examina el esquema de compensación de la empresa. Dependiendo del tamaño de la empresa y de lo bien que se hayan llevado los registros, el coste puede variar.
Tras el proceso de clasificación, la auditoría debe ser capaz de identificar cualquier posible disparidad salarial entre hombres y mujeres. La Comisión Negociadora del Plan de Igualdad se reunirá con todos los datos en mano para aprobar un plan de actuación.